Hace unos meses las jornadas laborales tenían una duración aproximada de 8 horas, actualmente, debido a la pandemia del Coronavirus, las mayoría de empresas a optado por acoger el teletrabajo, como una medida que les permite seguir laborando sin tener que correr el riesgo de que sus empleados se contagien de dicha enfermedad; esta solución también ha desencadenado en un aumento en las horas normales que un empleado trabajaba normalmente, como ya es sabido la jornada laboral normal traer consigo una carga laboral que puede generar una serie de factores de riesgo (físicos, psicológicos, cognitivos y sociales) que se manifiestan en la vida del trabajador, por lo que este incremento de horas trabajadas aumentaría (aún más) la carga y fatiga laboral.
Debido a todos estos factores, se crearon los programas de Pausa Activa, que son un período de recuperación del cuerpo, posterior a los estados de tensión por consecuencia de carga laboral. Y definitivamente son las opciones más simples para mejorar la salud y eficiencia laboral.
Estos programas generan mayor productividad, inspiran creatividad y mejoran la actitud de los trabajadores, de la misma forma que estos ejercicios nos ayudan a que nuestros músculos no se atrofien o lesionen debido a malas posturas adquiridos por la recarga laboral (estrés laboral).
Estas pausas deben realizarse como mínimo 2 veces durante la jornada laboral durante unos 15 minutos para obtener los beneficios que conllevan.
Beneficios de un programa de Pausa Activa
• Ayuda a disminuir el estres y fatiga laboral.
• Ayuda a recuperar la energía.
• Reduce la tensión muscular.
• Motiva y mejora las relaciones interpersonales de los trabajadores, y promueven su integración social.
• Mejora el estado de salud del empleado al estimular y favorecer la circulación.
• Mejora la movilidad articular, la flexibilidad muscular, la postura y el desempeño laboral.